Espacio habilitado para las personas con movilidad reducida en el interior de los autobuses urbanos. En estos autobuses, la persona con silla de ruedas debe de colocarse en sentido contrario a la marcha, con la parte posterior de la silla apoyada en el respectivo respaldo y con el cinturón de seguridad de la plaza debidamente fijado para inmovilizar la silla. Algunos autobuses cuentan en estas plazas con asientos plegables para ser utilizados por otros pasajeros cuando no viaja ninguna persona con movilidad reducida.