Automóvil familiar de tamaño mediano que ha sido "reformado para hacerlo accesible". Su diseño interior es óptimo para las personas con silla de ruedas. La plaza habilitada puede situarse en el asiento delantero del acompañante, en el puesto de conducción o en la parte centro del automóvil, integrada entre el resto de plazas en vez de aislada en el maletero. Es deseable que los fabricantes de automoción adopten esta idea para diseñar algún nuevo modelo con accesibilidad universal que salga de fábrica ofreciendo estas posibilidades a las personas con movilidad reducida sin necesidad de reformas posteriores.